A sólo horas del inicio oficial de la 62ª Convención, el esperado “Asado Minero” reunió en un distendido ambiente a todos los asistentes que ya se encontraban en Calama para participar del evento.
La habitual camaradería que caracteriza a las convenciones del IIMCh se hizo presente una vez más en el marco del tradicional evento organizado por el Instituto, que este año se realiza en la ciudad de Calama.
A menos de 24 horas del inicio oficial de la 62ª Convención, los asistentes al evento que ya se encontraban en Calama pudieron disfrutar de un alegre asado en el Park Hotel, sede de la Convención.
En un distendido y relajado ambiente, los asistentes animaron una alegre noche en torno al ya clásico “Asado Minero”, que esta vez sirvió como anticipo perfecto para la gran cita del Instituto, ya que se programó un día antes del inicio formal de la Convención.
Pese a que el evento se iniciaba formalmente el domingo 13, un día antes Calama ya concentraba un gran número de asistentes, que anticiparon su llegada atraídos por las interesantes visitas técnicas que se realizaron en la previa de la Convención (ver nota aparte).
Después de las dos visitas técnicas de la jornada del sábado 12, los asistentes que ya se encontraban en Calama concurrieron en masa hasta el hotel sede de la Convención para seguir compartiendo alegremente en torno a una de las actividades sociales más esperadas del programa.
Así, la familia minera presente en Calama disfrutó de un contundente asado, que incluyó diferentes productos cárneos, las infaltables empanadas, los clásicos chori-panes, abundantes ensaladas, y un buen vino para disfrutar la comida.
La velada incluyó música en vivo a cargo de una estudiantina, además de un breve saludo del presidente del Instituto, Luis Sougarret, y del gerente General de la división Chuquicamata, Julio Aranis, quien dio la bienvenida en su doble calidad de vicepresidente IIMCh y chairman de la Comisión Organizadora del evento.