para los ingenieros civiles de minas, que vivimos del usufructo de la minería, será un año de mezcla de optimismo y preocupación, y ojalá primen las buenas condiciones y no los malos augurios
Estimados colegas y amigos:
Estamos iniciando un año laboral 2021, considerando que marzo es el mes de partida de todo año, con aire de optimismo y de preocupación simultánea.
Hay optimismo en la minería chilena porque el resultado del ejercicio 2020 mostró que la continuidad operacional nos permitió generar recursos financieros para apoyar en los cuantiosos gastos a causa de la crisis social y sanitaria; complementada por el precio del cobre que estará muy bueno por un periodo no menor, lo que generará más trabajo, impuestos y reactivará proyectos; porque las empresas mineras tradicionales están desarrollándose bien, a pesar de la pandemia, y en las puestas en servicio de empresas, lo han hecho muy bien, aunque no hayan podido venir expertos extranjeros, demostrando la enorme valía de ingenieros y trabajadores chilenos.
Pero también hay preocupación porque la pandemia todavía no da tregua, con decenas de miles de contagios activos, aunque los vacunados sean superiores a 30% de la población; porque aún existen no pocos legisladores y posiblemente muchos constituyentes, que creen que la ecología parte por restringir el máximo la actividad minera; y porque la autoridad aún no toma conciencia de la importancia de la minería, dejándola relegada a una parte de un bi-ministerio; y, finalmente, porque existen los comunicadores que creen que la minería en sus buenos tiempos debe ser apretada con más impuestos y más privilegios laborales.
En resumen, para los ingenieros civiles de minas, que vivimos del usufructo de la minería, será un año de mezcla de optimismo y preocupación, y ojalá primen las buenas condiciones y no los malos augurios.
Para el IIMCh también es un año de grandes oportunidades y grandes desafíos. Tras un 2020 muy raro, con la sede cerrada por casi 10 meses, seguimos con actividades como los Jueves Mineros virtuales y realizamos una excelente 70 Convención. La nueva directiva ha logrado bastante avance en “limpiar la casa”, en aspectos como el manejo financiero, los registros de socios, las participaciones en instituciones y el apoyo a la Autoridad minera.
También tenemos como grandes desafíos hacer las juntas de socios para aprobar los nuevos estatutos y reglamentos, ponernos al día con las distinciones y reconocimientos de los colegas que cumplirán 50 años, y muchas otras cosas más.
Este Presidente, al igual que muchos directores del IIMCh, ya estamos con las 2 dosis de vacunas y a mediano plazo podríamos tener una actividad más plena y en forma presencial, sobre todo en los directorios y comisiones.
Como conclusión, estamos frente a un año de grandes desafíos, con múltiples oportunidades y muchos riesgos y amenazas. Ojalá todo salga lo mejor posible.
Juan Rayo Prieto
Presidente
Instituto de Ingenieros de Minas de Chile