Ampliación de Minera Los Pelambres, que permitirá duplicar la actual capacidad de producción del yacimiento, se pospondría hasta resolver conflictos con comunidades cercanas al tranque El Mauro.
La judicialización de los proyectos de inversión es una de las principales trabas que enfrenta hoy la minería. Y esto lo ha vivido de cerca el brazo minero del grupo Luksic, Antofagasta Minerals (AMSA), la mayor minera de capitales chilenos.
Tal es la incertidumbre que esta variable ha introducido a nivel de proyectos en la industria, que el grupo resolvió esperar a que se despeje el gran número de juicios que enfrenta desde hace más de una década por el Tranque El Mauro en la IV Región -depósito de relaves de Minera Los Pelambres- antes de tomar otras decisiones de inversión relativas a este yacimiento. Los juicios son con parte de la comunidad de Caimanes, ubicada a 50 kms. de Los Vilos.
La ampliación de Los Pelambres, que permite duplicar la actual capacidad de producción que en 2013 llegó a 419 mil toneladas, considera una inversión por unos US$ 10 mil millones. Si bien la iniciativa está en una etapa preliminar de diseño, el grupo supeditaría su concreción a una mayor claridad en el plano judicial, comentan fuentes cercanas a la minera. En la empresa manifestaron que la iniciativa no alcanza a ese monto, aunque no especificaron la inversión.Insistieron en que los juicios no tienen relación con la ampliación.
En AMSA evalúan ingresar durante el próximo año el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la ampliación, lo que no implica retrasos en su cronograma. Sin embargo, en la compañía ven con preocupación el problema que arrastran desde el año 2000, cuando se iniciaron los trámites para instalar el tranque. De la resolución de varios puntos, que van desde temas relacionados con el agua en la zona hasta otros de tipo arquelógico y riesgos de la obra, dependería que la firma diera el "vamos" a la millonaria inversión. En 2015 el grupo pretende concentrar el fuerte de sus esfuerzos en Minera Centinela, distrito creado a mediados de este año y que agrupa a El Tesoro y Esperanza.
Larga data
Caimanes es una comunidad ubicada en la Región de Coquimbo con cerca de 1.600 habitantes. Hasta la llegada de Minera Los Pelambres, los habitantes dependían de la minería artesanal, la pequeña agricultura, la elaboración de queso de cabra y cierta ganadería. El yacimiento funciona desde 1999, pero en 2001 adquirió el fundo El Mauro para construir el tranque que reemplazaría a tres tranques aprobados por la autoridad en 1997 y que ya no daban abasto para la ampliación de producción del yacimiento.
En mayo de 2002 se aprobó la Declaración de Impacto Ambiental y un año después la empresa comenzó a tramitar otros permisos ambientales. Así comenzó la seguidilla de demandas que ha debido enfrentar del brazo minero de los Luksic.
Los líderes que se oponen a la obra han ido cambiando. Sin embargo, desde que la minera llegó a un acuerdo por US$ 23 millones con el propietario de tierras en la zona, Víctor Ugarte -asesorado por el abogado Fernando Dougnac-, el conflicto tomó fuerza. Tras la salida de escena de Ugarte y un reparto de dineros que no dejó conformes a muchos habitantes del pueblo, nació en 2008 el Comité de Defensa de Caimanes, liderado por Cristián Flores y que reúne a cerca de 400 personas.
Pese a que la mayor parte de la comunidad no se opone a la presencia de la minera, el grupo se ha hecho escuchar en distintos ámbitos y frente a diversas autoridades.
Fuente: El Mercurio