La Asociación del Hierro y del Acero de China (CISA), la principal agrupación oficial del sector en el país, ve "poco probable" que el problema de exceso de oferta de hierro pueda mejorar en el mercado chino a corto plazo.
La demanda de acero en China continúa debilitándose mes a mes, lo que ha provocado que los almacenes de hierro en los puertos del gigante asiático hayan visto aumentar la cantidad de mineral acumulado en ellos 53% interanual en septiembre, hasta los 110,69 millones de toneladas.
Así lo anunció este martes la Asociación del Hierro y del Acero de China (CISA), la principal agrupación oficial del sector en el país, que ve "poco probable" que el problema de exceso de oferta de hierro pueda mejorar en el mercado chino a corto plazo, según expone en un informe que acaba de publicar.
De hecho, las cantidades almacenadas de hierro cada mes llevan siendo superiores a los 100 millones de toneladas desde febrero pasado.
Entretanto, sólo en septiembre, los precios del hierro importado cayeron 10,2% respecto a agosto, mientras que los del hierro producido en China descendieron 3,15%.
Al mismo tiempo, según datos de las aduanas chinas que publica hoy la agencia oficial Xinhua, el país importó sólo el mes pasado 84,69 millones de toneladas de hierro.
Esto eleva el total de las importaciones chinas de hierro en los nueve primeros meses de 2014 a unos 700 millones de toneladas, 16,5% más que en el mismo período del año anterior.
En ese mismo tiempo, de enero a septiembre incluidos, China aumentó sus exportaciones de acero 39,3% interanual, hasta 65,43 millones de toneladas.
Los márgenes de beneficio de las acerías chinas se han ido estrechando en los últimos años por la ralentización de la demanda tras la crisis internacional, sus problemas de exceso de producción local y el incremento de los precios internacionales del hierro por la presión de las grandes mineras mundiales.
Ante esta situación, China está preparándose para llegar a eliminar su sistema de autorización de importaciones de hierro, en vigor desde hace una década, con lo que espera impulsar sus adquisiciones de ese metal, del que ya es el mayor comprador mundial, con dos tercios del consumo global.
Este sistema de licencias fue creado como parte de los esfuerzos de China para contar con una voz unificada en las negociaciones anuales del hierro con las grandes mineras mundiales, que solía encabezar por parte china la siderúrgica Baosteel, a la vez que excluía a los posibles compradores especulativos no autorizados.
Sin embargo la medida tuvo el efecto de crear un mercado paralelo de intermediarios con licencia que se ofrecen a las acerías sin permisos para conseguirles el hierro que les encarguen, y cuyo papel será eliminado al cambiar el sistema.
El mecanismo se creó de esa manera porque, hasta hace cuatro años, los precios del hierro se decidían tradicionalmente en negociaciones mundiales entre las grandes mineras y las firmas y asociaciones siderúrgicas de cada país.
Desde 2010, las mineras ajustan los precios del hierro cada trimestre o incluso cada mes, de acuerdo con mecanismos financieros de futuros metálicos, como índices de precios del hierro de uso internacional, lo que empujó a China a lanzar en 2011 un indicador propio para poner sobre la mesa sus propios datos.
Fuente: EFE/América Economía