El domingo los trabajadores recibieron una propuesta de la empresa que, dijeron, no les dio las garantías para avanzar.
La primera de dos paralizaciones de 24 horas de duración cada una, concretó ayer el sindicato de Minera Escondida, la mina de cobre con mayor producción del país, que opera la angloaustraliana BHP Billiton.
Pese que la dirigencia de los trabajadores dialogó con la empresa hasta la tarde del domingo, la propuesta de la compañía, que llegó sólo a minutos del inicio de la asamblea que tuvo lugar a partir de las 21 horas, no los dejó satisfechos.
El presidente del sindicato, Patricio Tapia, dijo que no vieron garantías de que se avanzara hacia una solución para sus demandas, por lo que decidieron movilizarse.
Los trabajadores reclaman que la minera no lleva un adecuado registro de asistencia, además de problemas para ejercer su derecho a vacaciones durante el verano y, finalmente, dicen que la empresa, unilateralmente, habría elevado en 10% las metas de producción, pero sin contar con los equipos necesarios para poder cumplirlas.
Cercanos a la firma, comentaron que estas nuevas metas buscarían mejorar la productividad y, además, habrían sido pactadas en el marco del contrato colectivo, que rige desde febrero de 2013. Además que éstas serían alcanzables, lo que se habría comprobado en los últimos dos meses.
El sindicato tiene 2.800 trabajadores afiliados en total. La segunda paralización se espera para mañana.
Según explicó Tapia, en los últimos días se había logrado dialogar y avanzar con la empresa, pero esto no se tradujo en algo concreto. Además, se mostró abierto a retomar el diálogo con la minera.
Agregó que hace unos días mantuvieron contacto con la ministra de Minería, Aurora Williams, que la semana pasada cuestionó el llamado a paralización de advertencia y señaló que bastaba con entablar los reclamos ante las instituciones correspondientes.
A raíz de esto, acordaron una reunión con la secretaria de Estado para entregarle antecedentes de sus demandas.
Cambio de ejecutivos
La paralización coincidió con el arribo del nuevo presidente de Escondida, Hilmar Rode, quien sucederá a Edgar Basto, que a su vez tomará en forma interina la presidencia del área de Cobre de BHP Billiton, donde estaba Peter Beaven, que en el marco de una reorganización de a compañía fue nombrado presidente de finanzas.
Para las próximas semanas el nuevo ejecutivo tiene programadas varias actividades de bajo perfil.
Otras negociaciones
En paralelo, el sindicato de supervisores de Collahuasi informó ayer que comenzó su proceso de negociación colectiva con la empresa, al enviar la propuesta de contrato colectivo.
Esto se enmarca en el proceso que están encarando distintos sindicatos de supervisores de la minería privada, que buscan formar una alianza y unir fuerzas.
Fuente: Diario Financiero